Obedeciendo a las diferentes propuestas que se han hecho llegar a los responsables de la empresa, para mejorar la política de reciclado dentro de las propias oficinas, ponemos en marcha un par de estaciones piloto. La idea es dimensionar correctamente los medios que finalmente cubrirán todas las áreas de oficinas y cubrir un área de 1250 metros cuadrados.
Las consecuencias inmediatas van a ser un sentimiento personal de contribución a la causa, una reducción del número de papeleras y de sus bolsas de basura llenas tan solo en un 10% y que hacían inviable y costoso el reciclado a posteriori, el ejercicio físico asociado a levantarse y moverse, desviando la vista de la pantalla y sobre todo una formación en reciclado correcto que llevar a casa, enseñar a amigos y familiares y completar en el ámbito privado.
En 2018, cada navarro separó 23 kilos de envases en el contenedor amarillo, lo que supuso un aumento del 7,9% con respecto a 2017. Además, la cantidad de papel y cartón separada en el contenedor azul también experimentó un aumento del 6,4% con respecto a 2017, gracias a que se separaron 41,2 kg por habitante en el contenedor azul.
Si queréis informaros sobre el destacado papel que tiene Navarra en cuestiones de reciclado os recomendamos la lectura de este artículo.